La época de la Navidad está llena de la magia que compartimos con los niños que están a nuestro alrededor, que encuentran en los cuentos, cánticos, series y las películas todas esas historias llenas de personajes sorprendentes, así como lugares inimaginables de ensueño.

Los niños escriben sus cartas con los deseos, comparten juegos con sus amistades, tienen días libres por las vacaciones escolares, decoran el hogar con sus padres y visitan a familiares durante varias semanas.

Este diciembre de 2022 tendremos una temporada decembrina diferente a la de años anteriores, porque ya no estamos atravesando el fuerte período de confinamiento que tuvimos como medida de precaución, para evitar los contagios del Covid19.

Es por esto, que podremos reunirnos con familiares, amigos y seres queridos para compartir de momentos especiales, en esa tan anhelada presencialidad que esperamos y nos hacía tanta falta.

Más allá de los obsequios, es importante recordar con los más pequeños de nuestros hogares, que las tradiciones familiares y reuniones nos permiten crear hermosos recuerdos, que nos acompañarán a lo largo de los años.

También es un buen momento, para enseñarles valores de empatía y solidaridad, por aquellas personas que especialmente en esta temporada viven diferentes vicisitudes, que no les permiten disfrutar como otros de las celebraciones propias de estas fechas.

Existen variadas causas sociales que podemos apoyar en este tiempo, para ayudar a niños en condición de riesgo o abandono, enfermos en centros de salud o personas de la tercera edad, que están en albergues, asistiendo con los más pequeños a estos lugares como voluntarios para leer cuentos, jugar juegos de mesa, llevar alimentos, víveres u obsequios.

La Navidad más que recibir es dar, brindar nuestro tiempo y alegría especialmente con quienes están más cerca de nosotros, además de recordar y tener presentes a aquellas personas que más lo necesitan.

Autoría: Lislet Núñez @webchiquiticos