Consecuencias de la obesidad en niños a corto plazo

La obesidad infantil se relaciona con la aparición de alteraciones metabólicas (elevación de colesterol y triglicéridos en sangre, hígado graso, alteración del metabolismo de la glucosa), diabetes, hipertensión a edades más tempranas.

Se ha descrito que adolescentes femeninas con obesidad tienen mayor riesgo de desarrollar síndrome de ovario poliquístico, que puede predisponer a trastornos de fertilidad. La apnea del sueño (trastorno de la ventilación durante el sueño) ha sido observada hasta en 50% de niños con obesidad. Otro problema del exceso de peso es la sobrecarga mecánica, haciendo susceptible al niño de anormalidades y deformidades ortopédicas.

En el área psicológica, un niño obeso puede sufrir discriminación social, baja autoestima y depresión, estudios han asociado a la obesidad con burlas, bullying, marginación y menor desempeño académico.

Consecuencias de la obesidad en niños a largo plazo

Estudios a largo plazo estiman que 40% o más de los niños, y 70% o más de los adolescentes con obesidad llegarán a ser adultos obesos, con un impacto negativo en la salud. Los niños y adolescentes con sobrepeso y obesidad tienen mayor riesgo de presentar enfermedades crónicas (enfermedad cardiovascular, ciertos tipos de cáncer, diabetes y asma) en la edad adulta, aunado a elevada mortalidad por éstos problemas de salud.

Las enfermedades agudas y crónicas asociadas con el exceso de peso no solo afectan la calidad de vida del individuo, sino que también incrementan el costo individual, de la sociedad, costos de salud y baja productividad. La obesidad igualmente trae como consecuencia costos indirectos por disminución de años perdidos por discapacidad, incrementada mortalidad antes de la jubilación, jubilación adelantada, pensiones por discapacidad y reducida productividad por ausentismo en el trabajo.

Los profesionales de la salud, educación, medios publicitarios y sociedad organizada, tenemos las herramientas que ayuden a prevenir y disminuir el problema y evitar las consecuencias en la salud y economía para el individuo, familia, comunidad y país. La difusión e implementación de las prácticas de alimentación infantil son las estrategias para la prevención e intervención de la obesidad en niños y adolescentes. La lactancia materna exclusiva (solamente alimentar al bebé con lactancia materna) se ha asociado con menor riesgo de exceso de peso. La introducción de alimentos diferentes a la leche materna antes de los 6 meses de edad se ha asociado con mayor obesidad infantil.

El modelaje, es decir, el ejemplo de los padres y cuidadores del niño tienen un rol importante en las preferencias alimentarias, por lo que hay que reducir la exposición ambiental repetida a alimentos no saludables: altos en grasa, azúcares e hipercalóricos (bebidas endulzadas, saborizadas, refrescos, entre otros)

Dra. Dalmacia Noguera Brizuela.

De la formación académica de la Dra. Dalmacia destaca: Médico Cirujano de la Universidad Central de Venezuela (1994), Especialista  en Pediatría  y Puericulturade la Universidad Central de Venezuela en Sede Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo (1999), Especialista  en Nutrición,  Crecimiento  y Desarrollo en el Hospital  de Niños JM  de Ríos (2001), Consejera en Lactancia Materna con Certificación Galacma-UCV-Unicef,  Maestría  en Bioética UCV, además de varios cursos y actualizaciones de sus especialidades.

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